Ubicada en Alcudia, esta encantadora finca con fachada de piedra revela un remanso de serenidad rodeado de un exuberante oasis de jardín con piscina. Con una generosa extensión de 212 m2, la planta baja comprende 127 m2 de áreas de estar y 85 m2 de terrazas cubiertas. El área de entrada le da la bienvenida a una gran sala de estar/comedor y una encantadora cocina con acceso sin problemas a la terraza cubierta, un lugar ideal para cenas al aire libre. También hay un baño para invitados en el área de entrada. Una de las habitaciones cuenta con una única escalera de caracol que conduce a la primera planta, completa con un baño y una pequeña cocina.
Este diseño no solo es distintivo sino que también ofrece una entrada independiente, proporcionando una configuración ideal para alojamiento privado de invitados o una residencia para el cuidador si es necesario. Suba por una elegante escalera hasta el primer piso, que abarca 127 m2. Aquí, una pequeña sala de estar lo invita, brindando acceso a un balcón que ofrece vistas a los pintorescos alrededores. Dos habitaciones y dos baños completan este nivel superior, cada espacio emitiendo una sensación de comodidad y estilo.
A tan solo 15 minutos en coche de los pintorescos pueblos de Pollensa y Alcudia, con un acceso conveniente al aeropuerto y a Palma de Mallorca en 45 minutos, esta propiedad es una combinación perfecta de comodidad y tranquilidad. La propiedad cuenta con verandas maravillosamente sombreadas, creando un entorno idílico para cenas nocturnas y bebidas relajadas. El amplio garaje, con espacio para dos autos, agrega un toque práctico a este encantador refugio. Esta propiedad es más que una casa; es una invitación a un estilo de vida de tranquilidad y sofisticación. Para aquellos que buscan un retiro que armonice con la naturaleza y ofrezca comodidades modernas, esta joya de jardín es la elección perfecta.