Este local de 97 m2 en planta baja con fachada acristalada en Puerto Pollensa es el lienzo blanco perfecto para un negocio, oficina, o para convertir en vivienda, ya que la normativa lo permite y la distribución con ventanas en ambos lados lo favorece. Actualmente se encuentra sin amueblar, con una gran sala diáfana con zona de entrada y fachada acristalada, una parte trasera parcialmente separada con instalación de un lavabo para una cocina, y un baño completo con plato de ducha. El local está equipado con un sistema de alarma, ventanas de aluminio, suelo embaldosado, conexión a luz y agua. Tiene acceso a una piscina comunitaria. Se puede aparcar directamente enfrente del local en la calle y en un parking público cercano.